El fabricante japonés de motocicletas Yamaha cerró 2022 con un beneficio neto atribuido de 174.439 millones de yenes (1.231,9 millones de euros al cambio actual), un 12,1% más que los 155.578 millones de yenes (1.098 millones de euros) de 2021, según las cifras publicadas este lunes por la compañía.
Yamaha ha señalado que a pesar de que su actividad se vio afectada por las interrupciones en la cadena de suministro global, las ventas netas aumentaron debido, entre otros factores, a una recuperación en la demanda de motocicletas en los mercados emergentes.
En ese sentido, la facturación de la compañía ascendió a 2,248 billones de yenes (15.878 millones de euros), un 24,1% más que los 1,812 billones (12.799 millones de euros) del ejercicio anterior.
Por otro lado, su beneficio operativo alcanzó los 224.864 millones de yenes (1.587 millones de euros) entre enero y diciembre de 2022, un 23,3% más que los 182.342 millones de yenes (1.287,7 millones de euros) de 2021.
En cuanto a las previsiones sobre el contexto para 2023, la compañía nipona prevé que el problema de la falta de semiconductores se «recuperará gradualmente» a medida que avance el año.
Por otro lado, aumentará a 125 yenes (0,88 euros) el pago por acción para el año fiscal 2022 y la previsión para 2023 es elevarlo a 130 yenes (0,92 euros) por título.
Asimismo, ha estimado un beneficio neto atribuido de 160.000 millones de yenes (1.129,9 millones de euros), lo que supondría un descenso del 8,3% en comparación con 2022.
También prevé que la facturación crezca un 9%, hasta los 2,450 billones de yenes (17.301 millones de euros), y que el beneficio operativo se eleve un 2,3%, hasta los 230.000 millones de yenes (1.624 millones de euros).
Fuente: (EUROPA PRESS)
