El Partido de los Trabajadores de Corea del Norte tiene previsto celebrar a finales de diciembre una reunión clave para la estrategia política del Gobierno del próximo año, en la que se abordarán los planes de trabajo para 2023 y una serie de cuestiones importantes, según han adelantado medios estatales.
La reunión estará presidida por el líder norcoreano, Kim Jong Un, quien suele utilizar este tipo de encuentros importantes para el devenir del partido para emitir nuevas directrices de seguridad, además de objetivos económicos y su postura acerca de las relaciones con el exterior, especialmente con Washington y Seúl.
La escalada de tensiones en la península de Corea ha sido una constante a lo largo de este año. Pyongyang ha aumentado considerablemente el ritmo y el alcance de sus pruebas con unos misiles balísticos que pueden ir armados con una cabeza nuclear, a pesar de las resoluciones de Naciones Unidas que les prohíbe hacerlo.
A pesar de ello, Kim ya dejó claro recientemente después de una de estas pruebas que el «objetivo final» de Corea del Norte debía ser contar con la fuerza nuclear más potente del mundo.
Mientras tanto, Corea del Sur y Estados Unidos han reanudado este año sus ejercicios militares conjuntos a gran escala en respuesta a las pruebas de misiles norcoreanas.
