Las autoridades iraníes han informado este lunes de que se han incautado de un petrolero con bandera extranjera que transportaba unos 11 millones de litros de crudo de contrabando y se encontraba frente a las costas del país en el golfo Pérsico.
El juez Mojtaba Ghahrani ha indicado que el barco ha sido interceptado tras un mes de trabajos técnicos, según informaciones de la agencia de noticias Tasnim, que señala que el barco ha sido detenido por miembros de la Fuerza Naval de la Guardia Revolucionaria iraní.
«La información recibida apuntaba a actividades ilegales realizadas por compañías petroleras y se han tomado medidas para proteger los derechos legales del Gobierno, por lo que se tomarán medidas al respecto», ha dicho.
En este sentido, ha alertado de que estas «acciones criminales saldrán a la luz», por lo que el «castigo de los perpetradores de estos delitos será decisivo». «No habrá tolerancia», ha añadido.
Actualmente, tanto el capitán del buque como toda la tripulación se encuentran bajo custodia policial a medida que las autoridades investigan el caso en profundidad.
