La Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha informado del aumento de casos de cólera en Haití desde que se declaró el brote a principios de octubre, al superar los 2.200 casos sospechosos.
«Desde la notificación de los dos primeros casos confirmados de cólera (…) en Puerto Príncipe el 2 de octubre, el Ministerio de Salud de Haití ha informado a 23 de octubre de un total de 2.243 casos sospechosos, incluidos 219 casos confirmados, y 55 muertes notificadas», recoge el comunicado de la OPS publicado este martes.
La organización informa, a su vez, de que del total de casos sospechosos notificados, el 58 por ciento son hombres. Mientras, el 53 por ciento son menores de 20 años.
El grupo de edad que registra el mayor número de casos es el de los niños de 1 a 4 años, seguidos del de los niños de 5 a 9 años.
La mayoría de los casos –el 97 por ciento– se encuentran en la región de Ouest, donde se encuentra la capital del país, Puerto Príncipe. Los distritos de Cité Soleil y Puerto Príncipe representan el 80 por ciento del total de casos de la provincia.
Además, en la prisión de la capital se han notificado 271 casos sospechosos, de los cuales 12 ya han sido confirmados. También ha habido 14 fallecimientos.
República Dominicana informó el 20 de octubre del primer caso importado de cólera en el país. La paciente es una mujer de nacionalidad haitiana procedente de Puerto Príncipe.
La OPS ha reiterado a los Estados miembros a que continúen manteniendo vigilancia ante el cólera con el fin de detectar precozmente los casos sospechosos y prevenir así la propagación del virus. Con un tratamiento adecuado a tiempo, la tasa de letalidad de los pacientes hospitalizados es de menos del 1 por ciento, informa la agencia sanitaria.
En este sentido, la OPS ha instado a las autoridades a que garanticen condiciones adecuadas de saneamiento básico, acceso a agua potable y medidas de higiene.
Mientras, ha descartado imponer cuarentenas para limitar el movimiento de personas o el embargo de mercancías porque «resultan innecesarias e inefectivas para controlar la dispersión del cólera».