El Gobierno estadounidense ha denunciado este miércoles la prórroga del estado de emergencia impuesta por la junta militar que gobierna Birmania desde el golpe de Estado llevado a cabo hace dos años.
«Estados Unidos se opone firmemente a la decisión del régimen militar de Birmania de extender el estado de emergencia, prolongando el gobierno ilegítimo de los militares y el sufrimiento que inflige al país», ha explicado el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price.
Además, el portavoz estadounidense ha reafirmado, «en el tercer año desde el golpe injusto y desestabilizador», el compromiso del país norteamericano de apoyar al pueblo birmano en la consecución «de sus aspiraciones de una Birmania inclusiva y democrática», tal y como reza un comunicado del Departamento.
Price ha asegurado que Washington continuará «trabajando con los aliados y socios para apoyar los esfuerzos del movimiento a favor de la democracia» en el país, así como «negar la credibilidad internacional al régimen», cuando se han cumplido dos años del golpe de Estado.
Asimismo, se ha comprometido a presionar a la junta militar para que cumpla con sus compromisos con la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN) para que aplique sin dilación el plan de paz diseñado por el organismo como principal mediador internacional.
El régimen ha acordado horas antes que el actual estado de emergencia siga en vigor al menos seis meses más, lo que abre la puerta a mantener una represión que se hizo especialmente patente en las semanas posteriores a la asonada contra el Gobierno de Aung San Suu Kyi.
En estos dos años, unas 2.940 personas han perdido la vida víctimas de esta represión, según Asociación de Asistencia a los Presos Políticos (AAPP), una ONG que actualiza de forma diaria los datos sobre los abusos de las autoridades. La organización estima que más de 13.700 personas siguen detenidas por oponerse a la junta.
Fuente: (EUROPA PRESS)
