El alcalde de Pekín, Chen Jining, ha sido designado este viernes como nuevo jefe del Partido Comunista chino en el municipio de Shanghái, una más dentro de la ola de remodelaciones anunciada por el presidente chino, Xi Jinping, tras su consolidación absoluta como líder del partido en el gran congreso de la formación que terminó el pasado fin de semana.
Chen, de 58 años, se formó en la universidad de Tsinghua, alma mater del presidente chino, antes de especializarse en ciencias medioambientales en el Imperial College de Londres. Un año después de asumir en 2017 la alcaldía de la capital, impulsó un nuevo plan para mejorar la calidad del aire en la contaminada metrópolis y su gran logro hasta el momento ha sido la sustitución del carbón por gas natural en buena parte de las calefacciones domésticas de la ciudad.
Su nominación, anunciada por la agencia oficial de noticias china, Xinhua, en un escueta comunicado, cumple con la tendencia impuesta por Xi en el congreso de seleccionar a miembros de su círculo de aliados a puestos fundamentales dentro de las cúpulas de la organización y de los gobiernos locales, así como de elegir específicamente para estos cargos a expertos en ciencia y tecnología –seis de los 13 nuevos miembros del Politburó del partido cumplen con este requisito–.
También se espera que en las próximas horas se haga oficial la designación de Huang Kunming, hasta ahora responsable del Departamento de Publicidad del Partido Comunista (su sección de propaganda) como nuevo responsable de la formación en la provincia meridional de Cantón. Su predecesor, Li Xi, fue ascendido el pasado fin de semana al Comité Permanente y a la jefatura del departamento anticorrupción del partido.
Huang, de 65 años, tendrá a su cargo el municipio más poblado del planeta con más de 46 millones de habitantes y es considerado el principal núcleo económico emergente del país. Su cargo previo, confirman múltiples fuentes al ‘South China Morning Post’, será ocupado por Li Shulei, su antiguo adjunto al cargo.
Todos estos nuevos nombramientos acompañarán al presidente chino en lo que el mandatario describió este domingo ante los medios como «una revolución interna en la expedición hacia el futuro» del país con el propósito de «mantenerse firme en la profundización» del plan de reforma iniciado por Xi desde su llegada al poder.
Los delegados apoyaron la inclusión de varios conceptos teóricos en la constitución de la formación, entre ellos los llamados «Dos Establecimientos», que cimentan la figura de Xi como núcleo y guía del Partido a través de sus ideas «para el socialismo al estilo chino», con un fuerte componente capitalista y anticorrupción «en una nueva era» para el país.
